Deuda externa definida

Abadía de Senanque en Provenza con campos de lavanda

la deuda externa es la porción de la deuda de un país que se tomó prestada de prestamistas extranjeros, incluidos bancos comerciales, gobiernos o instituciones financieras internacionales. estos préstamos, incluidos los intereses, generalmente deben pagarse en la moneda en que se realizó el préstamo. Para obtener la moneda necesaria, el país prestatario puede vender y exportar bienes al país del prestamista.

romper una deuda externa

Una crisis de deuda puede ocurrir si un país con una economía débil no puede pagar la deuda externa debido a la incapacidad de producir y vender bienes y obtener un rendimiento rentable. El Fondo Monetario Internacional (FMI) es una de las agencias que realiza un seguimiento de la deuda externa del país. El Banco Mundial publica un informe trimestral sobre estadísticas de deuda externa.

Si una nación no puede o se niega a pagar su deuda externa, se dice que está en incumplimiento soberano. Esto puede llevar a los prestamistas a retener futuras liberaciones de activos que la nación prestataria podría necesitar. tales instancias pueden tener un efecto continuo, en el que la moneda del prestatario colapsa y el crecimiento económico general de esa nación se estanca.

Las condiciones de incumplimiento pueden dificultar que un país reembolse lo que debe, más cualquier sanción que el prestamista haya impuesto contra la nación delincuente. La forma en que se manejan los incumplimientos y las quiebras para los países difiere de la experiencia del mercado de consumo, lo que permite la posibilidad de que los países que han incumplido la deuda externa eviten potencialmente tener que pagarla.

cómo utiliza el prestatario la deuda externa

En ocasiones, denominadas deuda externa, las corporaciones y los gobiernos pueden adquirir deuda externa. En muchos casos, la deuda externa toma la forma de un préstamo vinculado, lo que significa que los fondos garantizados a través del financiamiento deben ser devueltos a la nación que proporciona el financiamiento. por ejemplo, el préstamo podría permitir que una nación compre los recursos que necesita del país que otorgó el préstamo.

La deuda externa, en particular los préstamos vinculados, podría establecerse para fines específicos definidos por el prestatario y el prestamista. Dicha ayuda financiera podría utilizarse para abordar las necesidades humanitarias o de desastres. Por ejemplo, si una nación enfrenta una hambruna severa y no puede obtener alimentos de emergencia a través de sus propios recursos, podría utilizar la deuda externa para obtener alimentos de la nación de la que recibió el préstamo vinculado. Si un país necesita construir su infraestructura energética, podría aprovechar la deuda externa como parte de un acuerdo para comprar recursos como el material para construir plantas de energía en áreas desatendidas.